El Consejo de Exportación de Lácteos de Estados Unidos (U.S. Dairy Export Council o USED en inglés) advirtió que el nuevo etiquetado frontal de advertencia en alimentos y bebidas impactará en la competencia y el comercio exterior del país.
Sostuvo que los socios comerciales de México que no siguen el modelo de etiquetado que se pretende implementar tendrán un impacto significativo porque estarían sujetos a implementar cambios en las etiquetas y denominaciones de los productos que exportan a México.
En el proyecto de modificación de la NOM-051 se afirma erróneamente que las empresas extranjeras no se verán afectadas y se asume que el cumplimiento de etiquetado de todos los productos importados se realiza a través de las etiquetas adhesivas que se aplican después de la importación y antes de la comercialización de éstos.
Sin embargo, muchas empresas extranjeras enfrentarán mayores costos debido a los nuevos requisitos del etiquetado frontal porque algunas hacen envases específicamente para el mercado local y no utilizan la opción de etiquetas adhesivas, aseguró.
“Estas empresas incurrirán en costos sustanciales, equivalentes a los que serán desembolsados por las empresas nacionales, para rediseñar nuevas etiquetas nuevamente y modificar la composición de sus productos. Debe tenerse en cuenta que las empresas asumen cosos sustanciales para el rediseño de las etiquetas cada vez que hay un cambio en el etiquetado”, indicó la USEDC.
Los fabricantes de alimentos, nacionales y extranjeros, absorberán inicialmente los costos del rediseño de la etiqueta, pero probablemente transferirán costos adicionales a compradores, acotó.