Alrededor del mundo, Kellogg trabaja todos los días por crear un entorno donde todas las personas sin importar su origen, orientación sexual, capacidades, estado civil, creencias o cualquier otro factor, sean tratadas con dignidad y respeto; es por ello que, representando el talento femenino de la industria alimenticia, participó este año en el World Economic Forum (WEF).
Kellogg es una empresa comprometida con causas que ayudan al crecimiento de la comunidad, reconociendo a la mujer como piedra angular en el camino a la seguridad alimentaria. Con su participación en el WEF, se busca difundir el aprovechamiento de la innovación en técnicas sustentables de una empresa a la vanguardia que cuenten con el respaldo internacional de Kellogg, para impulsar el desarrollo de las mujeres trabajadoras.
Durante la ponencia, Roberto Vázquez, director de asuntos corporativos de Kellogg para América Latina, expuso ‘la importancia del rol de la mujer en la industria alimentaria’; y Manuel López Portillo, vicepresidente de cadena de suministro de Kellogg Latinoamérica, resaltó el papel de las mujeres en la manufactura productiva, y su importancia en América Latina.
Para Kellogg las mujeres que trabajan en el campo son un verdadero motor productivo alimentario en el mundo. Recientemente, el Instituto Nacional de las Mujeres destacó que actualmente, las mujeres rurales constituyen una cuarta parte de la población mundial; por lo que valorar su labor es equidad, inclusión y visión del presente y el futuro.
Tan solo en México, de los 61.5 millones de mujeres, 23% habitan en localidades rurales y ellas representan el 34% por ciento de la fuerza laboral; por ello son responsables de más del 50% de la producción de alimentos en México.
“Las mujeres en la industria de alimentos, a lo largo de la cadena de valor –del campo a la mesa-, pueden ser consideradas un verdadero motor productivo alimentario en el mundo, hay que valorar su labor”; expresó Roberto Vázquez, director de asuntos corporativos de Kellogg’s para América Latina.
Precisamente en busca del empoderamiento femenino, Kellogg cuenta con el programa Women of Kellogg (WOK), donde a través de conversaciones y oportunidades, buscan el involucramiento tanto de hombres como mujeres, con el fin de lograr la igualdad de género en el lugar de trabajo para nuestro éxito personal, de equipo y de la empresa.
Como parte del intercambio de experiencias personales, Luz Consuelo Garza, directora del área de finanzas y Líder activa del grupo de WOK en Kellogg comentó: “En WOK he aprendido a hacer valer nuestra voz, el tener coraje de cambiar las cosas, el creernos lo mucho que valemos no solo como personas sino como profesionales, lo mucho que podemos aportar al éxito de nuestra compañía y la capacidad que tenemos para llegar a donde nos propongamos”.
Asimismo, Cristina Monteiro, directora de marketing para Kellogg Brasil expuso la importancia que tienen hoy en día las mujeres consumidoras, shoppers y tomadoras de decisiones, ya que ellas son quienes deciden qué productos llevar a casa y juegan un papel importante en el ciclo de consumo.
Aunado a estos esfuerzos, Kellogg’s cuenta con el programa D&I Diversity and Inclusion que busca fortalecer una cultura inclusiva mediante una sólida agenda y prácticas en la empresa, destacando que se requiere multitud de visiones, experiencias y trayectorias personales que aporten valor a la toma de decisiones, sumado a que la identidad de cada individuo es una ventaja competitiva que impulsa el crecimiento y la innovación.
“Como una empresa con espíritu y corazón, sabemos que la sustentabilidad obtiene más apoyo si integra el desarrollo de la comunidad y creemos firmemente que sin igualdad de género, el desarrollo sostenible no es desarrollo, ni es sostenible”; puntualizó Roberto Vázquez director de asuntos corporativos de Kellogg’s para América Latina.
El objetivo de Kellogg’s seguirá siendo el implementar políticas de diversidad que logren incrementar el porcentaje de promociones en el trabajo y contrataciones (balance entre hombres y mujeres), mejorando así la atracción de talento, disminuyendo los niveles de rotación y desarrollando planes de carrera robustos y medibles.