Contemplando los principios de calidad, seguridad y valor establecidos por su fundador, W.K. Kellogg, la compañía de alimentos se adentra en el 2023 preparada para los retos hallados en el camino. Ésta toma la innovación por eje rector y procura complacer preferencias de los consumidores, mientras atiende cada una de sus necesidades.
Kellogg sigue un exhaustivo y largo proceso para perfeccionar su oferta. Para la compañía, el consumidor es muy importante, por lo que procura ajustar el sabor y presentación de sus alimentos de acuerdo con sus gustos. Con una escucha constante, cada artículo es evaluado para conocer si todo detalle es de su agrado: sabor, textura, presentación y composición. Vía telefónica, sitio web, redes sociales o correo electrónico son consultados para tomar en cuenta sus perspectivas.
Un claro ejemplo de lo anterior es el deseo por un alimento con menor cantidad de azúcar. Para complacer esta preferencia, Kellogg optó por introducir Krunchers: una propuesta de los ya tradicionales cereales – Zucaritas, Choco Krispis y Froot Loops – con una menor cantidad de azúcar y alto contenido de fibra, vitaminas y minerales.
Los sabores también resultan importantes en este panorama, pues aun cuando existen productos característicos que conservan cada detalle de su composición, la compañía constantemente presenta nuevas propuestas que brillan por su originalidad. Tal es el caso de sus productos de Panadería sabor churros, rollos de canela, pan de muerto y concha. La rica experiencia venerada por los consumidores mexicanos e incluida en sus tradicionales desayunos fue hecha cereal.
A su vez, hallamos los casos de Extra y Zucaritas. En el caso del primero, Kellogg se esfuerza repetidamente por presentar giros al producto: chocolate, arándanos y carajillo. En cuanto al segundo, se introdujeron recientemente dos nuevos sabores: malteada de fresa y chocolate con malvaviscos.
“Como lo hemos señalado en muchas ocasiones, para nosotros el consumidor es una pieza clave en todo lo que hacemos, por ello también es primordial atender a las más recientes tendencias del mercado. Estas últimas involucran el panorama de presupuesto limitado provocado por las circunstancias económicas actuales o la accesibilidad, la digitalización en las compras, entre otros. Estos aspectos los consideramos seriamente y los tomamos en cuenta para establecer nuestros objetivos a futuro y beneficiar a nuestros consumidores”, aseguró Eduardo Lemos, director de Marketing para Kellogg México.
Con la conveniencia del consumidor como elemento central de la estrategia, Kellogg no solo innova en el desarrollo de sus alimentos, sino también en las presentaciones de los mismos, los tamaños de los empaques que puedan adecuarse a los diferentes bolsillos de las familias mexicanas; en sus canales de distribución para responder a las nuevas necesidades de digitalización de los consumidores, entre muchas otras cosas que los colocan como una empresa promotora del perfeccionamiento de todos sus procesos: desarrollo de novedades, producción, distribución y retroalimentación.