Jóvenes hijos de reconocidos cacaoteros de Tabasco, así como productores regionales, e investigadores coinciden en que es necesario promover, desde dicha entidad, el chocolate como una bebida de primer nivel y saludable, que debe permanecer en la mesa de todos los hogares del país y del mundo.
Durante los conversatorios: “El Cacao como medicina y alimentos” y “Juventudes cacaoteras”, se destacó la importancia del cacao como alimento y como un producto que ayuda a la salud, y al chocolate como una bebida sumamente energética, denominado por su calidad “bebida de los dioses”.
Agrupados, los involucrados en la producción y comercialización del cacao y chocolate de la región, pugnaron por fomentar el consumo de las bebidas derivadas del cacao, como lo hacían los ancestros, logrando vitalidad y una mejor salud, luego de consumir estos productos naturales y vigorizantes.
En el panel “El cacao como medicina y alimentos”, participaron los doctores Roberto Weber Burque Palacios y Pedro García Alamilla, de la UJAT; así como Herbert Adolfo Castellanos Ramírez, de Kakaw Museo de San Cristóbal de las Casas, Chiapas; Verónica Candelero García, de Chocolate Cacaste, y Anne Gschaedle, del CIATEJ de Gudalajara, quienes subrayaron que el chocolate, alimento emblemático de Tabasco, se debe consumir siempre con alto contenido de cacao, que sea de un color oscuro, sin mayor cantidad de azúcar.
Durante el foro, consideraron que la cultura del consumo de cacao, no solamente se enfoca al chocolate, ya que, en el caso de Tabasco, de forma cotidiana se consume el pozol o chorote, que es elaborado con cacao, y eso lo convierte en una bebida refrescante y saludable, que es además, parte del patrimonio cultural; sin dejar pasar la repostería con cacao, guisados como el mole, y que por todo ello, señalaron el cacao es cultura para los tabasqueños, los chiapanecos y México en general.
Por otro lado, en el conversatorio “Juventudes cacaoteras”, los descendientes de la familia productora de chocolates CACEP, Rosy y Vicente Gutiérrez Sánchez, exhortaron a valorar el producto local, consumir chocolate de calidad. Exhortaron a los estudiantes de gastronomía allí presentes, a buscar los mejores ingredientes para elaborar sus alimentos, y como tabasqueños, sentirse orgullosos de que el origen del cacao está en México y en Tabasco.